Cantidad y calidad…perfeccionismo, miedo1 min read

Leí por ahí que uno de los secretos de los grandes genios de la humanidad, es que producían mucho. Que se dedicaban a producir, a crear. Creaban cosas buenas y malas. Generalmente muchas malas antes de crear una nueva. Algunos se ponían cuotas de producción, porque si no se tienen las manos sucias con el trabajo, si no se pone a trabajar la mente todo el tiempo, se atrofia. Pero no. Nosotros queremos hacer las grandes cosas a la primera. Aprendamos que no funciona así.

Bach escribía una cantata a la semana. Edisson se propuso hacer un invento menor cada semana, y sacar al menos un gran invento cada seis meses. Einstein se hizo famoso por 5 papers que publicó, pero escribío alrededor de 250. Mozart produjo más de 600 obras musicales, de las cuales son geniales unas diez. Newton escribió más de religión que de ciencia.

En resumen: ¡produce! No juzgues si el trabajo es bueno o malo. Es mejor un mal trabajo que un trabajo inexistente. Malos trabajos nos enseñan a hacer grandes trabajos. Incluso, mucho de nuestro mal trabajo, puede ser considerado como un muy buen trabajo para alguien más. Producir, producir, producir. El hombre existe para producir. Que no nos de miedo el juicio de otros sobre nuestra obra o trabajo. Es una estupidez dejar de hacerla por miedo a ese hipotético jucio, a esa casi probablemente inexistente crítica. Producir!